El corazón de acero
ha perdido mil batallas,
ha ganado un par de guerras pero no está en paz.
Él quiere
recuperarse, quitarse el escudo que le envuelve,
pero tiene miedo porque le
vuelvan a atacar.
Se mantiene en
guardia a todas horas y no descansa.
El acero pesa, pero
no se atreve a cambiarlo por valentía.
Lo que él llama
cobardía, ya ha vencido muchas veces
y no se da cuenta de que combatiendo de
frente se aprende
y aunque pierda mil veces más, siempre gana.
|
No hay comentarios:
Publicar un comentario